Marcharme con tu olor en mi cuerpo, esencias que me persiguen y me dejan sin aliento, solo al respirar.
Me entrego todas las veces fatalmente, consciente que sos mi perdicion, mi condena.
Ni bien, toque tu puerta, me abriste las puertas a mi cruel desatino. Y yo entre, sin vacilar, me recibiste en tu cuerpo, te observe y supe que estaba perdida. Besos , que me encadenaron a un solo objetivo, tu carne gloriosa, que tanto me gusta probar.
Me devoraste los labios, y yo te combati con mi lengua feroz, mientras nos sacabamos los ya perdidos vestidos, cayendo en derrotado resultado.
Mi probo destino, no puede garantizarme un seguro dolor. Mientras tanto, hago oidos sordos , y me abro indiscriminadamente a tu pecadora penetracion.
Me arrodillo ante tu deseo, y pruebo todo lo que me ofreces, mientras mis rodillas tocan el frio suelo, mi boca arde de tamaña pasion. Me tomas por el cuello, y me haces tuya, loca, desmedidamente. Degusto tu pared de ladrillos, cuando por detras avanzas sobre mis superficies lujuriosas. Arremetes , no soy yo, te lleva la locura de un extasis prestado.
Me llevo tus marcas, mis moretones sobre mi blanca piel, tu olor, mi deseo....
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