miércoles, 23 de mayo de 2007

tu paz, mi paz


tus locuras, mi intento de estabilidad.
tu impaciencia, mi perseverancia.

tu enojo, mi pocas ganas de participar.

tu enganche, y el mio...

mi odio y el tuyo...

jueves, 10 de mayo de 2007

las rapaces.


Las rapaces son todas aquellas mujeres que no vacilan ni escatiman esfuerzos para tener al MACHO DE ORO. Su voluntad solo ronda un tema, el MACHO en cuestión. Son como un trompo que giran alrededor de un solo eje. No les importa disimular, ni que el objeto de deseo sepa de sus intenciones. Nada la detiene, ni siquiera la mirada reprobatoria de miles de mujeres, al fin y al cabo ella solo le interesa la mirada de su elegido. Son mesiánicas y están dispuestas a todo para apoderarse del hombre objeto de su deseo. Son monotemáticas, y no les importa. Son como aquellas máquinas lanzapelotas, que te cagan a pelotazos y uno queda inerme frente a los disparos. Son napoleónicas o sea émulas de Bonaparte pregonan a los cuatro vientos, EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS. Si es casado, comprometido, viudo, soltero o puto...para ella es una nimiedad ...esto es mero detalle. Si arrasan con familias, con hijos con hogar hasta que ella llega, con novias o con nada, es otro detallecito salvable por supuesto. Salvable en virtud de su deseo. Son volcánicas en su pasión, y en la cama juegan al Cirque Du Soleil. Los hombres se titirizan y quedan desbordados e hinchados de orgullo, es más su ego crece más que su pene, que eso es mucho decir. Hasta que rapaz de turno se cansa, porque el velloncino de oro, se le desmejoró, es que con tanto toqueteo, se dió cuenta que no era de precioso metal, sino de bronce, que cuando uno lo toca mucho pierde el brillo, y encima queda verde...así que rapaz sigue buscando el perpetuo objeto de deseo, que obvio no llega nunca, porque el verdadero anhelo de ella está en la búsqueda de aquello que no se concreta ...como los hebreos que dele que te dele y el mesias no llega más. Pero por las dudas sigue empeñada buscando, acechando,desechando trastos de lo que queda de su ligero paso. Y el hombre queda llorando inerme, descartado, desinflado su ego y quien te dice si algo más tambien, no?